Un sistema de información es un sistema, automatizado o manual, que engloba a personas, máquinas y/o métodos organizados para recopilar, procesar, trasmitir datos que representan información. Un sistema de información engloba la infraestructura, la organización, el personal y todos los componentes necesarios para la recopilación, procesamiento, almacenamiento, transmisión, visualización, diseminación y organización de la información.
LAS ETAPAS DEL PROCESO DE DESARROLLO DE SOFTWARE
Cualquier sistema de información va pasando por una serie de fases a lo largo de sus vida. Su ciclo de vida comprende una serie de etapas entra las que se encuentran las siguientes:
- Planificación
- Análisis
- Diseño
- Implementación
- Pruebas
- Instalación o despliegue
- Uso y mantemiento
Estas etapas son un reflejo del proceso que se igue a la hora de resolver cualquier tipo de problema. Ya en 1945, mucho antes de que existiese la Ingeniería del Software, el matemático George Polya describió este proceso en su libro How to solve it. Básicamente, resolver un problema requiere:
- Comprender el problema (análisis)
- Plantear una posible solución, considerando soluciones alternativas (diseño)
- Llevar a cabo la solución planteada (implementación)
- Comprobar que el resultado obtenido es correcto (pruebas)
PLANIFICACIÓN- Antes de que se le de oficialmente el pistoletazo de salida a un proyecto de desarrollo de un
sistema de información, es necesario realizar una serie de tareas previas que influirán
decisivamente en la finalización con éxito del proyecto. Estas tareas se conocen popularmente
como el fuzzy front-end del proyecto al no estar sujetas a plazos. Las tareas iniciales que se
realizarán esta fase inicial del proyecto incluyen actividades tales como la determinación del
ámbito del proyecto, la realización de un estudio de viabilidad, el análisis de los riesgos
asociados al proyecto, una estimación del coste del proyecto, su planificación temporal y la
asignación de recursos a las distintas etapas del proyecto.
ANÁLISIS- Lo primero que debemos hacer para construir un sistema de información es averiguar qué es
exactamente lo que tiene que hacer el sistema. La etapa de análisis en el ciclo de vida del
software corresponde al proceso mediante el cual se intenta descubrir qué es lo que realmente
se necesita y se llega a una comprensión adecuada de los requerimientos del sistema (las
características que el sistema debe poseer).
¿Por qué resulta esencial la etapa de análisis? Simplemente, porque si no sabemos con
precisión qué es lo que se necesita, ningún proceso de desarrollo nos permitirá obtenerlo. El
problema es que, de primeras, puede que ni nuestro cliente sepa de primeras qué es
exactamente lo que necesita. Por tanto, deberemos ayudarle a averiguarlo con ayuda de
distintas técnicas
DISEÑO- Mientras que los modelos utilizados en la etapa de análisis representan los requisitos del
usuario desde distintos puntos de vista (el qué), los modelos que se utilizan en la fase de
diseño representan las características del sistema que nos permitirán implementarlo de forma
efectiva (el cómo).
Un software bien diseñado debe exhibir determinadas características. Su diseño debería ser
modular en vez de monolítico. Sus módulos deberían ser cohesivos (encargarse de una tarea concreta y sólo de una) y estar débilmente acoplados entre sí (para facilitar el mantenimiento
del sistema). Cada módulo debería ofrecer a los demás unos interfaces bien definidos (al
estilo del diseño por contrato propuesto por Bertrand Meyer) y ocultar sus detalles de
implementación (siguiendo el principio de ocultación de información de Parnas). Por último,
debe ser posible relacionar las decisiones de diseño tomadas con los requerimientos del
sistema que las ocasionaron (algo que se suele denominar "trazabilidad de los
requerimientos").
En la fase de diseño se han de estudiar posibles alternativas de implementación para el
sistema de información que hemos de construir y se ha de decidir la estructura general que
tendrá el sistema (su diseño arquitectónico). El diseño de un sistema es complejo y el
proceso de diseño ha de realizarse de forma iterativa. La solución inicial que propongamos
probablemente no resulte la más adecuada para nuestro sistema de información, por lo que
deberemos refinarla. Afortunadamente, tampoco es necesario que empecemos desde cero.
Existen auténticos catálogos de patrones de diseño que nos pueden servir para aprender de los
errores que otros han cometido sin que nosotros tengamos que repetirlos.
IMPLEMENTACIÓN- Para la fase de implementación hemos de seleccionar las herramientas adecuadas, un entorno
de desarrollo que facilite nuestro trabajo y un lenguaje de programación apropiado para el tipo
de sistema que vayamos a construir. La elección de estas herramientas dependerá en gran
parte de las decisiones de diseño que hayamos tomado hasta el momento y del entorno en el
que nuestro sistema deberá funcionar.
A la hora de programar, deberemos procurar que nuestro código no resulte indescifrable. Para
que nuestro código sea legible, hemos de evitar estructuras de control no estructuradas, elegir
cuidadosamente los identificadores de nuestras variables, seleccionar algoritmos y estructuras
de datos adecuadas para nuestro problema, mantener la lógica de nuestra aplicación lo más
sencilla posible, comentar adecuadamente el texto de nuestros programas y, por último,
facilitar la interpretación visual de nuestro código mediante el uso de sangrías y líneas en
blanco que separen distintos bloques de código.
Además de las tareas de programación asociadas a los distintos componentes de nuestro
sistema, en la fase de implementación también hemos de encargarnos de la adquisición de
todos los recursos necesarios para que el sistema funcione (por ejemplo, las licencias de uso
del sistema gestor de bases de datos que vayamos a utilizar). Usualmente, también
desarrollaremos algunos casos de prueba que nos permitan ir comprobando el funcionamiento
de nuestro sistema conforme vamos construyéndolo.
PRUEBAS- Errar es humano y la etapa de pruebas tiene como objetivo detectar los errores que se hayan
podido cometer en las etapas anteriores del proyecto (y, eventualmente, corregirlos). Lo suyo,
además, es hacerlo antes de que el usuario final del sistema los tenga que sufrir. De hecho,
una prueba es un éxito cuando se detecta un error (y no al revés, como nos gustaría pensar).
INSTALACIÓN O DESPLIEGUE- Una vez concluidas las etapas de desarrollo de un sistema de información (análisis, diseño,
implementación y pruebas), llega el instante de que poner el sistema en funcionamiento, su
instalación o despliegue.
De cara a su instalación, hemos de planificar el entorno en el que el sistema debe funcionar,
tanto hardware como software: equipos necesarios y su configuración física, redes de
interconexión entre los equipos y de acceso a sistemas externos, sistemas operativos
(actualizados para evitar problemas de seguridad), bibliotecas y componentes suministrados
por terceras partes, etcétera.
Para asegurar el correcto funcionamiento del sistema, resulta esencial que tengamos en cuenta
las dependencias que pueden existir entre los distintos componentes del sistema y sus
versiones. Una aplicación puede que sólo funcione con una versión concreta de una biblioteca
auxiliar. Un disco duro puede que sólo rinda al nivel deseado si instalamos un controlador
concreto. Componentes que por separado funcionarían correctamente, combinados causan
problemas, por lo que deberemos utilizar sólo combinaciones conocidas que no presenten
problemas de compatibilidad.
Si nuestro sistema reemplaza a un sistema anterior o se despliega paulatinamente en distintas
fases, también hemos de planificar cuidadosamente la transición del sistema antiguo al nuevo
de forma que sus usuarios no sufran una disrupción en el funcionamiento del sistema. En
ocasiones, el sistema se instala físicamente en un entorno duplicado y la transición se hace de
forma instantánea una vez que la nueva configuración funciona correctamente. Cuando el
presupuesto no da para tanto, tal vez haya que buscar un momento de baja utilización del
sistema para realizar la actualización (por la noches o en fin de semana, por ejemplo).
USO Y MANTENIMIENTO- La etapa de mantenimiento consume típicamente del 40 al 80 por ciento de los recursos de
una empresa de desarrollo de software. De hecho, con un 60% de media, es probablemente la
etapa más importante del ciclo de vida del software. Dada la naturaleza del software, que ni se
rompe ni se desgasta con el uso, su mantenimiento incluye tres facetas diferentes:
- Eliminar los defectos que se detecten durante su vida útil (mantenimiento
correctivo), lo primero que a uno se le viene a la cabeza cuando piensa en el
mantenimiento de cualquier cosa.
- Adaptarlo a nuevas necesidades (mantenimiento adaptativo), cuando el sistema
ha de funcionar sobre una nueva versión del sistema operativo o en un entorno
hardware diferente, por ejemplo.
- Añadirle nueva funcionalidad (mantenimiento perfectivo), cuando se proponen
características deseables que supondrían una mejora del sistema ya existente.
EL CICLO DE VIDA DE UNA BASE DE DATOS
Una base de datos no es más que un componente de un sistema de información. Por tanto, el
ciclo de vida del sistema de información incluye el ciclo de vida de la base de datos que forma
parte de él. En particular, desde el punto de vista de la base de datos, centraremos
principalmente nuestra atención en las siguientes actividades:
- Definición del sistema: Durante la etapa de análisis de requerimientos del
sistema, nos fijaremos especialmente en todos los requerimientos asociados a los
datos con los que ha de trabajar nuestro sistema.
- Diseño de la base de datos: El análisis de los requerimientos del sistema nos
permitirá organizar los datos con los que nuestro sistema habrá de trabajar. Este
proceso de diseño, que está íntimamente ligado a la futura base de datos de
nuestro sistema, lo descompondremos en tres fases:
· Diseño conceptual (descripción del esquema de la base de datos utilizando
un modelo de datos conceptual).
· Diseño lógico (descripción de la base de datos con un modelo de datos
implementable, como puede ser el caso del modelo relacional).
· Diseño físico (descripción de la base de datos a nivel interno, de acuerdo
con las características del sistema gestor de bases de datos que decidamos
utilizar).
- Implementación de la base de datos (la parte de la implementación del sistema
correspondiente a la creación de la base de datos).
- Carga o conversión de los datos: Como parte de la instalación o despliegue del
sistema, tendremos que introducir en la base de datos todos aquellos datos que
resulten necesarios para que las aplicaciones de nuestro sistema de información
puedan funcionar. Como parte de esta inicialización de la base de datos, puede
que resulte necesario extraer datos de otro sistema y convertirlos a un formato
adecuado para nuestro sistema (entre otras cosas, porque el esquema de nuestra
base de datos probablemente diferirá del esquema de las bases de datos de las que
se extraigan los datos necesarios para arrancar nuestro sistema).
- Conversión de aplicaciones: Si determinadas aplicaciones (que ya existiesen
anteriormente al diseño de nuestro sistema) han de seguir funcionando, dichas
aplicaciones deberán adaptarse al esquema de nuestra base de datos. Por tanto,
como parte del mantenimiento de dichas aplicaciones, tendremos que diseñar los
mecanismos adecuados para que estas aplicaciones puedan seguir funcionando correctamente sobre una base de datos diferente a la base de datos sobre la que
fueron diseñadas inicialmente. A veces, podremos solucionar este problema
creando vistas adecuadas de nuestra base de datos para tales aplicaciones. Otras
veces, tendremos que modificar la implementación de las aplicaciones antiguas e,
incluso, rehacerlas casi por completo.
- Verificación y validación: Como en todo sistema de información, deberemos
verificar que la base de datos y las aplicaciones funcionan correctamente.
Además, deberemos comprobar que el sistema construido se ajusta a las
necesidades reales que promovieron su proyecto de desarrollo (esto es, validar el
sistema y sus requerimientos).
- Operación, supervisión y mantenimiento: Finalmente, una vez puesto en
marcha el sistema, se llega a la etapa "final" del ciclo de vida de todo sistema de
información (en la que, como ya vimos, se repetirá todo el ciclo cada vez que
tengamos que realizar modificaciones sobre el sistema ya existente).
Referencias: http://flanagan.ugr.es/docencia/2005-2006/2/apuntes/ciclovida.pdf